El Caso Bartleby

Nathaniel Touchstone es un abogado de mediana edad del Wall Street de 1856 cuyas ocupaciones profesionales aumentan al ser nombrado Agregado a la Corte Suprema de Nueva York. De este modo, se ve obligado a contratar a un nuevo escribiente que alivie sus labores. En respuesta a su anuncio aparece en su oficina un joven de aspecto inexpresivo. Es Bartleby. El joven escribiente, aunque algo perturbador, parece ser un trabajador competente, apto para las labores que le son encargadas. Pero al poco tiempo, Bartleby abandona sus tareas y permanece absorto mirando a través de la ventana hacia un enorme muro de ladrillo. Nathaniel, incapaz de motivar a su empleado, o de tan siquiera despedirle, se convierte en testigo del mal que le acontece. Un estado permanente de introversión que le impide relacionarse con el mundo que le rodea y le hace “preferir no hacer nada”.